Si bien se acepta generalmente que los virus , las bacterias y otros microorganismos constituyen las causa básicas de las enfermedades en los animales domésticos , los errores de manejo son predisponentes signficativos. Muchos brotes de enfermedades podrían reducirse al mínimo o aun ser prevenidos totalmente con un manejo adecuado.
Cuando se encierra muchos animales , cualquiera sea la especie , en una área pequeña , aumenta el contacto tanto directo como indirecto . Esto tiene una relación directa con la incidencia de enfermedades; cada animal que se introduce en el grupo lleva el potencial de introducir una enfermedad a cada uno de los demás. A medida que la magnitud del grupo aumenta la atención que cada individuo recibe tiende a disminuir mientras que la posibilidad de que una enfermedad se establezca antes de que se reconozca y trate , aumenta.
Además , a medida que se intensifican los métodos de producción del ganado , el intervalo entre el nacimiento y la comercialización o la reproducción se acorta y la eficiencia de la conversión de los alimentos en carne , leche o lana aumenta y se incrementan los factores de stress que aumentan la posibilidad de enfermedad. Es ahí donde debemos tomar en cuenta la importancia que tiene el manejo , un manejo adecuado disminuye la posibilidad de adquirir enfermedades que disminuyan la productividad o se prolongue el intervalo entre el nacimiento y la comercialización de los animales.